PROCESO
Diez personas Transgénero fueron invitadas por el artista para hablar sobre sus historias. Con el auxilio de cartas-preguntas, les entrevistades fueron estimulades a contar sobre momentos, recuerdos y pensamientos, que mezclaban de forma aleatoria, cuestiones de género, memorias de la infancia, deseos para el futuro y asuntos de su vida cotidiana. De forma lúdica y orgánica, cada participante reveló un poco de sus procesos de (des)identificaciones con los géneros hombre/mujer, así como los desdoblamientos de sus trayectorias como personas trans en la actual sociedad brasileña.
Las conversaciones se llevaron a acabo durante el período de pandemia por COVID-19, en el que el equipo y les entrevistades tomaron todas las medidas de protección y seguridad recomendadas. Por este motivo, la mayoría de las grabaciones se realizaron en la propia casa del artista. Esta breve colección de relatos sensibles fue la base para desarrollar la exposición. Al utilizar las voces de las personas trans para comunicar sobre la transgeneridad, buscamos dar visibilidad a las formas plurales de identificarse como persona trans y a las diferentes maneras de agenciar esta identidad disidente, borrada y perseguida en Brasil.
Después de las conversaciones, el artista revisó los audios grabados, en un ejercicio de escucha empática y reflexiva. Luego comenzó la creación de las piezas de la exposición, dibujos abstractos, con la aplicación de técnicas mixtas sobre papel recubierto. Las obras reflejan las impresiones y sensaciones del artista sobre cada persona, individualmente. Las narrativas transpasan el quehacer artístico, donde cada color, línea y textura otorga una nueva capa de significado y sensación. Todo el proceso creativo fue grabado.
Después, artistas y diseñadores de sonido e imagen se unieron para crear obras audiovisuales, que unen las voces de les muses con la imagen creada a partir de sus relatos. Estos cortometrajes amplían la experiencia estética y poética de la exposición, al colocar en evidencia a todas las personas involucradas en la creación: artista, muses y diseñadores. El resultado es una experiencia audiovisual en la que los dibujos crean capas visuales sobre las historias compartidas. Es una forma de, literalmente, dar voz a las obras y permitir que les espectadores las escuchen y sean afectades por ellas